Por Luis Burgos (FAO –ICOU)
INTRODUCCION
Dentro de la fenomenología HUMANOIDE de casos estrictamente
FISICOS, existen dos tipos de encuentros cercanos: Las ENTIDADES ASOCIADAS, con
observación del OVNI y las ENTIDADES NO ASOCIADAS, sin observación de objeto
alguno relacionado al evento. Es obvio que las primeras son las más jugosas
para la investigación y análisis, pero aun así, los registros de extraños
personajes aparecidos ante la vista de atónitos testigos han resultado y
resultan también muy interesantes a la hora de evaluarlos. Ocurre que al no
distinguirse aeronave, las diferentes interpretaciones pueden jugar una mala
pasada a los investigadores de turno ¿Estuvo el protagonista realmente frente a
un SER EXTRATERRESTRE, una APARICION MARIANA, un FANTASMA o simplemente un BROMISTA? Por otra parte, las
probabilidades de una ALUCINACION o una CONFUSION con un humano, no escapan a
la hora de desentrañar el caso. Como veremos más adelante, en nuestro Banco de
Datos de HUMANOIDES conformado por 500 denuncias argentinas desde 1947 a hoy,
existen sucesos por demás jugosos de estos misteriosos intrusos nocturnos.
GEOGRAFIA DEL LUGAR
El caso de marras acontece dentro de la Isla Santiago, a la
cual los testigos accedieron desde La Plata a Ensenada y allí por la avenida
Almirante Brown que lleva al balneario de Punta Lara. Se trata de un humedal
natural que conforma el delta del mismo nombre, el cual se separa de la Isla
Paulino, ya en el partido de Berisso, por un canal de 200 metros de ancho. Se
recorren un par de kilómetros asfaltados y luego de traspasar el puente cuyo canal
conecta el Río de La Plata con el Club Regatas La Plata, se llega a lo que
podríamos denominar LA ZONA CERO, es decir, el epicentro del encuentro cercano.
Un pequeño canal que vivorea unos 700 metros y desemboca en el río, quizás sea
el sitio exacto donde la figura antropomorfa se perdió en la noche del eclipse.
La selva marginal se sitúa a ambas márgenes. Zona inhóspita, donde abunda el agua
y la frondosa vegetación. El tendido eléctrico y los postes de alumbrado siguen
su curso hacia la histórica Escuela Naval Militar, fundada en 1872 por el
entonces presidente Domingo Sarmiento, pero reinstalada donde hoy se encuentra,
en 1943.
Ubicación del encuentro: Zona 0 |
TESTIGOS
Resultaron testigos de esta insólita aparición nocturna,
una familia platense compuesta por Cristian (43 años), su señora Mirta (33), su
hijastra (19), su sobrino (12) y la nena de ambos de tan sólo treinta meses.
Cinco protagonistas de una historia increíble, y cito a los cinco, pues ya
verán por qué…
EL ENCUENTRO
La famosa noche del
eclipse del domingo 20 de enero se presentaba límpida, tachonada de estrellas y
con algo de viento, que no molestaba en absoluto a los miles y miles de
ansiosos espectadores de “la Luna roja”. La familia se dirigió, como otras
veces, a la zona del embarcadero de la Escuela Naval Militar enclavada en plena
Isla Santiago. El reloj marcaba las 21:15 Hs. Mates, vianda, aire fresco y
charla eran los condimentos para esperar el momento del eclipse. Pero hacia la
medianoche, la menor sintió frío y decidieron partir y culminar de ver la Luna
oculta en su propio domicilio platense. Con Cristian al volante, su señora de
acompañante y los tres restantes atrás, emprendieron el regreso. A los pocos
minutos, en una larga recta que conforma el camino asfaltado, Cristian nota
ALGO RARO a lo lejos: Una SILUETA ALTA, que calcula en más de dos metros, se
hallaba al lado izquierdo del camino, siendo iluminada a la distancia por los
faros del vehículo. Daba la sensación que estaba de espaldas. Debido a la sorpresa,
aminora la marcha y baja las luces del automóvil para una mejor visión. Y es allí donde se percata que el personaje
cruza la calle, de forma normal y se introduce en el follaje lindero al camino.
Metros más adelante, al pasar por el lugar donde supuestamente se escondió, no
observó nada extraño y siguió su rumbo ya que su esposa no quiso detenerse. Los
cinco miembros de la familia contemplaron, en mayor y menor medida, la figura
en cuestión según la fugacidad y perspectiva visual desde el interior del móvil.
Este canal fue utilizado como vía de escape? |
EL HUMANOIDE
En la reconstrucción IN SITU ubicamos el máximo
acercamiento entre el visitante y Cristian en unos 40-50 metros, al momento que
éste cruza el camino. La poca visibilidad del lugar, ya que justamente en ese
sector varias luminarias de sodio estaban APAGADAS, sumado a que Cristian bajó
las luces, no permitieron tener una buena lujosidad de detalles de la entidad. Aun
así, estimamos en no menos de 2 metros su estatura, de contextura estilizada y
enfundado en una vestimenta uniforme color gris, pero no luminosa. La parte de
la cabeza “más oscura” que el resto del cuerpo. Y como dato curioso, los brazos
abiertos y algo inclinados hacia delante junto a su torso. Eran exactamente las
00.20 horas ya del lunes 21 de Enero…
Investigación IN SITU: Panorama nocturno del lugar |
OVNILOGIA COMPARADA
A lo largo de varias décadas contabilizamos e investigamos
una cifra muy interesante de estas ENTIDADES en rutas y caminos. Solitarias y
sin provocar encuentros, suelen manifestar actitudes de HUIDA o INDIFERENCIA
hacia los testigos. Pero tres datos significativos los encuadran. Su irrupción
en HORAS NOCTURNAS, su VESTIMENTA siempre clara (blanca o gris) y su TIPOLOGIA (la
N° 3, seres altos). Sucesos similares abundan, pero existe una zona donde han
proliferado en buen número a lo largo de las décadas: EL SUR SANTAFECINO…
ANTECEDENTES ZONALES
Precisamente esta zona de la ribera bonaerense, contiene
episodios por demás interesantes relacionados al Fenómeno OVNI, especialmente
por parte de pescadores, quienes junto a los cazadores, los ruralistas y los
automovilistas, conforman “el núcleo privilegiado de testimonios OVNI”.
El 19 de Marzo de 1974 en horas del anochecer, la señora
ENCARNACION DEL VALLE GUERRERO, nos manifestó haber observado desde su
vivienda, en cercanías de la ex Propulsora Siderúrgica (hoy SIDERAR) una
enigmática y altísima SILUETA LUMINOSA, de vestimenta celeste, “flotando” a un
costado de la torre conocida como “La Cebolla”, ubicada a 3000 metros rectos
del caso que nos ocupa…
OLGA CH. hoy residente en España, nos narra: “Una madrugada
de 1978, a eso de las 03:00 horas, estábamos de fiesta en una disco que había
en Punta Lara llamada “Tío Marcelo” (muy famosa en su época). Salimos tres parejas
a tomar fresco y nos sentamos en el murallón costanero mirando al río. Todo era
quietud. De repente, vimos salir desde el agua un PLATILLO VOLADOR totalmente
iluminado y con un gran estrépito, muy ruidoso. Parecía de día y hasta se veían
perfectamente los barcos que esperan su entrada en la rada. El agua de su parte
inferior caía nuevamente al río. Se suspendió en el aire unos segundos, se hizo
mucho más pequeño o redujo su luminosidad y se alejó raudamente hacia el monte
cercano de Boca Cerrada. Quedamos muy asustados y particularmente yo quedé con
los ojos doloridos quizás por la potente luminosidad. Durante varios meses se
me aparecía esa imagen en mi memoria. Jamás lo olvidaré…”
Una cálida noche del verano del 2007, ARTURO F. se hallaba pescando a eso de la una de la
madrugada en un sector del Arroyo Largo, distante unos centenares de metros del
caso de Cristian, cuando contempla un espectáculo inusual en el río: Por
espacio de una hora, un verdadero show de
“cinco objetos luminosos” se sumergían y emergían de las aguas en un
comportamiento que se repitió idénticamente varias veces durante la
observación.
Antecedentes en la misma región |
Sin dudas, región de observaciones anómalas, donde el folklore regional alimenta las expectativas de más de uno y que el investigador de campo sabe muy bien que estos relatos resurgen en muchos casos, quizás más de lo que uno supone. Versiones de empleados y trabajadores, tanto de la Escuela Naval como de Astilleros Río Santiago, también ubicado en la zona, indican la aparición de inexplicables fenómenos lumínicos nocturnos a lo largo de los años. Pero también si de historias y leyendas se trata, afloran la de los tres naufragios cuyas embarcaciones estarían enterradas bajo las aguas… o un añejo mini cementerio de una familia extranjera en el interior del monte… como así de ruidos extraños y sonidos guturales nocturnos provenientes de diferentes sectores de la selva.
HIPOTESIS DE TRABAJO
A la hora de las evaluaciones, estos casos de ENTIDADES NO
ASOCIADAS no solamente tienen en su faz la carencia de un objeto volador sino
también LA FALTA DE EVIDENCIAS concretas ¿Esto es negativo? Sí. No hay dudas,
pero si exclusivamente nos apegamos a ello, más del 80 % de la casuística
argentina de las décadas del 40, 50, 60, etc. se derrumbaría ante ¡¡¡LA FALTA
DE PRUEBAS!!!
Por tanto, la base de toda investigación siguen siendo LOS
TESTIGOS, muchos totalmente confiables, otros no tanto y otros no confiables.
Obviamente que si al relato se le adosan elementos probatorios mejor aún. Pero
si no los hay, está la sagacidad del ufólogo para definir un caso como
POSITIVO, NEGATIVO o DUDOSO. Como ejemplo de ello, tres clásicos “creíbles” de
la ovnilogía nacional donde lo que menos sobresalen precisamente son LAS
PRUEBAS:
A las 08:30 Hs. del 20 de julio de 1965, la mañana se
presentaba nublada y con llovizna en el Gran Buenos Aires. En ese momento, RAMON
PEREYRA (38) se encontraba repartiendo mercadería en la zona de Villa La
Florida, en la localidad de San Francisco Solano, a dieciocho kilómetros de la
Capital Federal. De repente observa que desde el cielo venía cayendo una
especie de PARACAIDAS LUMINOSO. Esto le llama muchísimo la atención y decide ir
a su encuentro. Camina unos centenares de metros, cruza las vías del tren
General Belgrano, un arroyuelo y se interna en el conocido Monte de los Curas,
donde años atrás funcionaba un monasterio. Allí se percata que lo que bajó no
era un paracaídas: Dentro de un artefacto posado, de forma OVOIDAL y cúpula
transparente se hallaba sentado un individuo con un mameluco gris y una capucha
y a unos treinta metros se encontraba otro personaje, de igual vestimenta pero
con la capucha hacia atrás por lo que pudo distinguirle muy bien el rostro.
Cabello corto y rubio, de unos 1.80 metros de altura, portaba unos grandes
binoculares colgados en su cuello y llevaba una cartuchera en su pierna derecha
y un cinturón con hebilla plateada. Su calzado semejaba botas de cuero. Una
persona totalmente “normal”. El intruso, al notar la presencia de Pereyra corre
inmediatamente a la nave y se cruza con éste, a punto de prácticamente toparse,
a lo que Pereyra le preguntó: “LE PASA ALGO”. El aparato comenzó a elevarse y
se perdió en el firmamento. Si bien intervino la policía local NO SE
ENCONTRARON RASTROS del aterrizaje ni nada anómalo que pudiera vincularse al
relato de Ramón Pereyra, quien nunca se cansó de decir que lo que vio fue "un ruso"...
A la una de la madrugada del 14 de junio de 1968, MARIA
ELODIA PRETZEL (19) despidió unos pasajeros del motel “La Cuesta”, ubicado
sobre la ruta N° 20 y a dos kilómetros del centro de Villa Carlos Paz
(Córdoba). Su padre, Pedro Jacobo
Pretzel, propietario del mismo, aún no había llegado. La joven, pensando que
alguien había prendido las luces del salón se dirigió hacia allí y se encontró
con un insólito visitante: Un ser de más de dos metros de altura, ataviado con
una especie de malla enteriza color celeste fosforescente y portando una esfera
luminosa en su mano izquierda, se encontraba parado a pocos metros de ella. En
su mano derecha presentaba un gran anillo, a modo de manopla y al levantarla
María Elodia sentía que perdía fuerzas y se mareaba y cuando el humanoide la
bajaba, ésta recuperaba los sentidos. De actitud amistosa, el intruso, al cabo
de unos minutos desaparece de la habitación y al poco tiempo arriba su padre
quien encuentra a la joven inconsciente y tendida en la cama. En determinado
momento, la testigo siente en su mente la frase: ”NO TENGA MIEDO”. El doctor
HUGO VAGGIONE (33), médico de cabecera de la familia, constató SOLAMENTE en la
jovencita un ESTADO NERVIOSO producto quizás del impacto emocional. Como aporte
positivo al caso tenemos la re-investigación efectuada por DANIEL LOPEZ (FAO
Baires) veinte años después, donde María Elodia revive la situación como si
hubiera transcurrido la noche anterior.
Durante la noche del 17 de noviembre de 1969, AQUILINO
RAMON ACOSTA (44) encargado de la estancia “Mi Recuerdo”, ubicada en Crotto,
próximo a Olavarría (Bs. As.), se levanta sobresaltado al notar movimientos
raros en el exterior de la finca. En medio de la oscuridad, contabilizó el insólito
desplazamiento de diecisiete figuras entre los árboles. Las mismas, alumbraban
el terreno “como buscando algo” con unas especies de linternas que disparaban
haces luminosos. Pero lo que más le llamo la atención fueron sus piernas de
color rojo y transparentes. Por momentos, daban la impresión que levitaban. LA
UNICA EVIDENCIA que presentó Acosta fue una “afección en su vista”…
POLOS DE ATRACCION
La predilección del Fenómeno por incursionar en
INSTALACIONES CIENTIFICAS y MILITARES reaparece en este caso con la presencia
de la Escuela Naval Militar, en las cercanías del encuentro. Pero sin dudas que,
más allá del cableado y el monte, EL AGUA surge como el atractivo principal. Es
frecuente el accionar de OVNIs y sus ocupantes manifestarse en zonas hídricas
por más pequeñas que éstas resulten, aun teniendo un río o un mar a su
disposición: aguadas, arroyos, tanques australianos, piletas de natación,
lagunas, etc.
Miembros FAO en la entrada de la Escuela Naval |
Parte de las instalaciones de la Escuela Naval en la isla |
Por ejemplo en la región ensenadense-berissense, a fines de
los 90 aconteció un caso de ENTIDADES NO ASOCIADAS que bauticé como “LAS
MONJITAS DE BERISSO”. De pequeña estatura, ataviados con una vestimenta negra a
manera de túnica y con su cabeza cubierta, irrumpieron durante más de una semana
en el barrio SUPE de Berisso y en la zona conocida como El Puente Roma, donde
precisamente allí cruza un canal que linda con la destilería YPF y desemboca en
el Río de la Plata. Así también estos diminutos humanoides se dejaron ver en la
vieja y abandonada Usina Hidráulica del Puerto La Plata…
LAS SIETE VARIANTES DE LO QUE PUDO HABER OCURRIDO
PESCADOR: Si bien ese pequeño canal que desemboca en el río
no es lo mejor que presenta la región para la pesca, algunos son habitúes de
ese arroyuelo y de hecho, encontramos una vez internados en el monte, sendos
pasadizos entre la maleza y prendas de vestir. Por tanto, ALGUIEN pernocta o
transita por el lugar ¿Resultaría muy extraño “confundir” un pescador nocturno
con la entidad insólita descrita por Cristian y su familia? Si bien la balanza
se inclinaría por lo AFIRMATIVO no sería concluyente en un 100%.
BROMISTA: Tal vez, la hipótesis con menos sustentos al no
existir OTROS TESTIMONIOS surgidos por estos días sobre denuncias de este tipo
¿Alguien disfrazado la noche del eclipse para asustar o burlarse de ocasionales
testigos desplazándose en automóviles?
LADRON: Interesante postura suponer una persona al acecho
de automovilistas con fines de robo. Pero el personaje de turno NO TUVO
INTENCIONES de detener el vehículo sino todo lo contrario: HUYO y/o SE ESCONDIO
en la selva marginal…
ALUCINACION: Percepción que no corresponde a ningún tipo de
estímulo externo. Una hipótesis por demás viable pero que pierde fuerza ante
una visión COLECTIVA con tres mayores de edad y dos menores. Y acá juega un
papel fundamental la reacción de la nena, la quinta testigo al momento de la
aparición, al exclamar: “Ay, me asuste”, cubriéndose parte de su cara con una
mano…
Por último, debemos aclarar que Cristian y su señora no
toman ninguna bebida alcohólica, ni presentan adicciones a los fármacos.
BUZO TACTICO: Probablemente en épocas de dictadura o con
hipótesis de conflicto (Chile, Inglaterra), estos COMANDOS de las fuerzas
operacionales de la Armada Argentina hubieran servido como una explicación
lógica para responder a la observación de Cristian y su familia. Más aún
apoyados en la cercanía de la Escuela Naval Militar y la geografía ideal de
este delta para su entrenamiento… pero en la actualidad, esta sospecha se
desvanece prácticamente por completo.
Grupo comando en entrenamiento |
FRAUDE: Desligados de una CONFUSION ¿Realmente Cristian y
familia fueron testigos de una presencia ALIENIGENA en el Monte Santiago?
Quizás nunca lo sabremos. Está en el lector CREER O NO CREER su versión. La
salvedad que se realiza en estos casos nos remite a la estadística de TESTIGOS
OVNI NACIONALES y dentro de los miles que figuran desde 1947 a hoy, solamente
un puñado surge como FRAUDES COLECTIVOS, es decir, “una asociación de personas
que cometen embuste con determinado fin (broma, publicidad, etc.)”. La mayoría
de los casos FRAUDULENTOS de la Ovnilogía son cometidos INDIVIDUALMENTE o a lo
sumo en parejas.
SER EXTRATERRESTRE: Si bien COINCIDEN y mucho, como hemos
visto, otros encuentros argentinos de ENTIDADES SOLITARIAS con el caso que nos
ocupa, la falta de pruebas concretas lo hace retroceder unos escalones al
momento de las DEFINICIONES. Pero
nuestra investigación zonal arrojó algo de luz a este controvertido caso: Una
versión muy confiable nos da cuenta que el martes 22 a las 23:30 Hs. (a menos
de 48 horas del suceso de Cristian), una pareja transitando con su automóvil
por el mismo camino se sorprende al ver entre la maleza una enigmática SILUETA
con OJOS VERDES BRILLANTES ¿Acaso la misma figura que se le apareció a
Cristian?
EL MISTERIO DE LA LUZ VERDE…
La aparición esa misma noche de una extraña luz en el
cielo, que nada tuvo que ver con el paso de la ISS, Iridium u otros satélites,
hace sin dudas, robustecer la hipótesis de que ALGO ANOMALO sucedió entre el
cielo y la tierra de la Isla Santiago:
Hacia las 22:30 Hs. del domingo 20, vecinos de Villa
Rubencito, barrio lindero a la isla, aprecian sobre la misma las evoluciones de
un objeto volador de color VERDE por espacio de unos minutos…
A las 00:20 Hs. ya del lunes 21 se produce “el encuentro
cercano tipo III” de Cristian junto a su familia, o sea, 1 hora y 50 minutos
después…
A las 02:01 Hs. del mismo lunes 21, una vecina del barrio
Los Hornos, en la ciudad de La Plata, se sorprende al visualizar el vuelo rumbo
al Río de la Plata de un objeto volador con luces VERDES, al cual le pudo tomar
un par de fotos con su celular Samsung J7, justo en el momento del pico máximo
del eclipse…
A las 02:30 Hs., casi 30 minutos después, trabajadores que
se hallaban de turno en el Astilleros Río Santiago, son testigos del vuelo de
un objeto color VERDE en dirección al Monte Santiago…
A las 00:30 Hs. ya del martes 22, ANGEL T. junto a otra
persona que lo acompañaba, ven desde una vivienda de Punta Lara el
desplazamiento sur-norte de un objeto volador BLANCO que les llama la atención,
al no percibir ruido, ni distinguir las típicas balizas de aeronavegación…
A las 23:30 Hs. de ese mismo martes 22, se habría producido
el segundo encuentro con el HUMANOIDE por parte de una pareja transitando en
automóvil por el mismo camino…
Objeto volador verde captado en Los Hornos, La Plata |
EPILOGO
Resulta obvio que una sucesión de hechos extraños ocurrido
en la misma porción geográfica de la ribera en tan sólo 48 horas, nos hacen
cuestionar si existió una ligazón o fue producto de la mera casualidad ¿Qué
tipo de relación hubo entre LA LUZ VERDE y EL HUMANOIDE? Pero de lo que no
tenemos dudas es que este “Encuentro a
la luz del Eclipse” no fue un caso más. Hacía mucho tiempo que en la región no
se denunciaba un evento de esta naturaleza. Por tanto, si bien cerramos un
capítulo lleno de DUDAS, CERTEZAS e HIPOTESIS para todos los gustos, y como
toda investigación de campo lo requiere, las pesquisas zonales continúan totalmente
abiertas...
Equipo de investigación FAO La Plata:
Lucia López – Mónica Alzamendi- Patricia Gómez- Nelson
Polanco – Miguel Peralta – Diego Sampedro – Raúl González – Luis Hernández y
Luis Burgos.-